No estamos seguros pero creemos que lo de vender productos puede venir de hace más de mil años de antigüedad. Más allá de los fenicios, de los reinos de Panchala, Kuru, Kosala y Videja. Mucho más allá de la India, de los faraones de Egipto o de cuando en Grecia había reyes y no la primera democracia. Todos nosotros hemos podido ver en películas o hemos sufrido en nuestras propias carnes a algún vendedor que hace lo que sea para encasquetar sus productos. Miente, trata de dar pena, es excesivamente agresivo, manipula… Pero con la llegada de internet parece que esto ha desaparecido, al menos en la red… Y no es así ya que existen estrategias de marketing online.
Una mala estrategia de marketing online
Queremos dejar claro que este artículo, más que ningún otro, es totalmente subjetivo, y muestra qué tipo de personas hay montando negocios en internet. Da la casualidad de que nos gusta formarnos y mejorar en diversos temas y, por ello, nos suscribimos a todo aquello que nos interesa dentro de nuestro ámbito. Por ejemplo, temas de marketing online, de asesoramiento o coaching en estrategias de marketing, así aprendemos sobre conductas, sobre cómo modificarlas o para buscar estrategias más acertadas.
Pues bien, estamos suscritos a seis o siete webs de coaching o asesores especializados en marketing y les seguimos en sus redes sociales. Resulta que dos de estas seis personas han seguido las mismas estrategias de marketing online para crear un «vínculo mayor» con sus seguidores.
Estrategias de marketing online protagonizadas por la manipulación
Así cómo lo escucháis. Por supuesto, son historias inventadas. Todo comienza con la publicación de un post en el que hablan de que están enfermos o enfermas, o que han querido suicidarse por culpa del terrible estrés laboral o en el que han dejado de lado su trabajo por motivos de: ¡Tristeza, dolor, sufrimiento, pérdida hasta del alma!
Hablan de su “obsesión con el trabajo”, de que no tienen otra vida, pero que aún así siguen ayudando a todo el mundo, a empresarios, a amigos y a familiares para después decirte… ¡No podía más! Después, ambas personas continúan narrando que su dolor y tristeza carece de sentido porque ganan mucho dinero, porque tienen muchos clientes y porque son grandísimos profesionales.
Algunos o algunas de ellas hasta lo ordenan por fechas. Tal mes me pasó esto y lo otro, incluso sueltan la tontería de que dejaron de lado sus negocios durante un pequeño espacio de tiempo (un mes), o que los abandonaron o incluso que los vendieron porque estaban muy pero que muy mal. Sin embargo, continúan diciendo que volverán o que han vuelto al trabajo ya que regresan con más energía y con más experiencia que nunca tras haber pasado el peor momento de su vida.
Por supuesto, no se olvidan de sus lectores y ambas personas acaban agradeciendo el terrible y grandísimo apoyo incondicional de sus seguidores y lectores. Ante lo cual, ellos se vuelcan dándoles su hombro a modo de soporte emocional a través de comentarios. A la gente le encanta mientras ellos o ellas hablan como su fueran verdaderos héroes.
¿Por qué son tan lamentables estas estrategias de marketing?
Bien, en primer lugar, antes de dicho post, estas personas tienden a “desaparecer” de su web. Dejan sus rutinas diarias de escribir artículos, responder emails y contestar a cada uno de los comentarios de sus seguidores. Esto crea una sensación de: ¿Qué ocurre? ¿Dónde estará? ¿Por qué no contesta? ¿Por qué no escribe?
Después, lanzan este “bombazo informativo”, que no tiene otro nombre para mí. Y, eso es algo tan sumamente triste que cualquier persona del “mundo común” no reconocería. Y por ese motivo, sus lectores piensan: ¡Dios! ¡Pobrecita! ¡Y yo pensando que estaba descuidando su negocio, que no era profesional! ¡Qué mala persona soy por haber pensado mal! ¡Ánimo! ¡Guau, que experiencia! Les falta decir: ¡Te quiero! ¡Estaré aquí para ayudarte! ¡Te contrato!
Por supuesto esto no acaba aquí.
Lo más curioso de todo es que, tal y como mencionamos antes, en un periodo tan sumamente corto en el que sólo a súper cracks les daría tiempo a recuperarse al 100% de tan terribles situaciones, no sólo están a tope trabajando, volviendo a hacer lo mismo que antes (hay una de estas personas que incluso dice que había vendido su negocio de coaching de marketing online y que luego lo volvió a levantar, con más gente y mejor… ¡Pero si hemos estado recibiendo tus emails en el periodo que dices que habías vendido la empresa!), e incluso también hay quien aparece sonriendo y diciendo que está trabajando desde un país exótico… Osea que sí. Que estás trabajando desde miles de kilómetros pero algo de vacaciones también te estás pegando. Lo curioso es que les funciona y la gente se lo traga.
Como veis hay buenas y malas estrategias de marketing online. Y vosotros, ¿pensáis que todo vale a la hora de llevar estrategias de marketing?